Adiós Patato...
Así como en el 2006 me entristeció comentar la muerte de Ray Barreto, ahora toca recordar a Patato. Aunque tuvo una vida larga y MUY productiva, aún me hubiesen quedado ganas de verlo tocar una vez más. Mi encuentro con Patato también fue en California, en uno de los últimos conciertos del San Francisco Jazz Festival. Mi compañera interna y yo guiamos 100 millas de Salinas a Oakland para el concierto "Conga Kings". Aunque teníamos curiosidad por conocer a uno de los homenajeados del Heineken Jazz Fest, nos atrajo más los boricuas Giovanni Hidalgo y Plena Libre, quienes eran los teloneros del concierto. Sin embargo, quedamos boquiabiertas por la alegría, entusiasmo y vitalidad de Patato al tocar las timbas. Ayudado por unos palitos, repicaba los tambores para un sonido preciso, mostrando su dominio magistral del instrumento. No conforme con eso terminó su intervención bailando un yambú con una sonrisa de oreja a oreja. Patato era alguien que amaba la vida y la vivió intensamente. Fue todo un banquete musical que ayudó a aliviar nuestra nostalgia por Puerto Rico. No le pude agradecer lo suficiente, lo mucho que significó para nosotras poder sentirnos de vuelta en el Caribe por sólo unas horas. Espero que Patato siga rumbeando dondequiera que esté.
otra reseña de la muerte de Patato aquí
imagen: lpmusic.com
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